Antiguo, clásico y tradicional. La principal característica de esta “picada” es que todos sus pescados son traídos directamente desde Tongoy, Puerto Montt y Calbuco. Se recomienda probar las Pailas marinas y los Pasteles de jaiba. Para los carnívoros también hay lugar, con el exquisito Lomo a lo pobre. El mejor local para disfrutar de las delicias del mar en la capital. Las porciones son bastante abundantes.